
Aniversario del LUM: conservar la memoria para emprender el futuro
Esta semana, el Lugar de la Memoria, Tolerancia e Inclusión Social (LUM) cumplió tres años de existencia. A pesar de ser un espacio que permite rescatar la memoria de una época sangrienta que vivimos en el país, el LUM fue cuestionado por aquellas personas interesadas en esconder el pasado, ocultar los crímenes y fomentar la impunidad. Son estas personas quienes quieren perpetuar el silencio y el olvido, pero las voces que se callaron están presentes para mantener vivo el recuerdo de años oscuros, y demandando que el horror no se repita.
Necesitamos conservar la memoria, mostrar el impacto que tuvo el conflicto armado interno y hacer visibles los testimonios de las víctimas quienes, en su mayoría, pertenecíamos a los sectores más invisibilizados: los pueblos indígenas, que estuvimos atrapados entre dos fuegos, fuimos obligados y obligadas a desplazarnos, y en muchos casos, hasta ahora seguimos buscando a nuestros familiares desaparecidos.
Reconocemos la labor que realiza el LUM para mostrar la diversidad de voces y rostros que experimentaron la violencia del conflicto armado interno, y buscar la convivencia entre las diversas memorias, para el aprendizaje mutuo. No obstante, queremos enfatizar que aún falta mucho que hacer, ya que no todas y todos están presentes, en el LUM faltan las voces de los cientos de miles de mujeres indígenas que en la década de los noventa fueron sometidas a esterilizaciones forzadas y que veinte años después siguen esperando justicia y reparación, perpetuando la violencia contra ellas.
Conservar la memoria no significa perpetuar el dolor ni fomentar el rencor. Debe ser aprender las lecciones del pasado para poder emprender el futuro desde el respeto a la vida, a la diversidad cultural, los derechos individuales y colectivos de todos y todas para construir un Perú mejor.